Con el paso de los años es frecuente notar manchas pigmentadas en nuestra cara que previamente no existían. Aunque hay una gran cantidad de lesiones que pueden afectar la cara, vamos a repasar brevemente las lesiones más frecuentes.

Los léntigos solares, también llamados actínicos o seniles, son máculas bien delimitadas de color marronáceo que aparecen sobretodo en zonas expuestas al sol (cara, manos, escote, espalda y dorso de manos).

Los puntos rubí y las telangiectasias son dos lesiones vasculares muy frecuentes, que pueden ser tratadas mediante tratamiento láser o luz pulsada, por lo que vamos a mencionar sus principales características.

Si quieres mejorar el aspecto de tu piel es importante que te dejes asesorar por expertos. Tener una rutina facial simple pero muy eficaz es posible gracias a la cosmética médica.